Hoy leo en el Foro del equipo un post sobre el “cabreo” que tiene una compañera que corre en la Once como piloto de uno de los tandems del equipo de invidentes. El cabreo se debe a que a pesar de haber entrenado a rajatabla todo lo que la tocaba, y de llevar el régimen monacal de un equipo de este tipo (con idea de ir a las Olimpiadas de este año) han quedado últimas en su primera carrera de esta temporada.
Jaime99 (el nick de otro compañero que corre larga distancia con muy buenos puestos y tiempos) comenta que el deporte competitivo de verdad se debe hacer con 20 años, que ahora hay que hacerlo para disfrutar, para superarse a uno mismo y sin obsesionarse. Con lo cual yo estoy muy de acuerdo, sobre todo en la parte de disfrutar en los entrenamientos, que al fin y al cabo es el 99% del tiempo que dedicamos al deporte, el resto del tiempo, el escaso 1%, se lo puede llevar las competiciones. Sin embargo comenta que si la gente en vez de ir sufriendo como un perro en el puesto 20 fuera un minuto más lenton entonces disfrutaría el doble aunque quedase el 40.
En esto ya no estoy tan de acuerdo. Creo que depende del sujeto. Pienso que a muchos nos gusta la sensación de hacer nuestra mejor carrera, dando el máximo (sufriendo como un perro), para quedar el 15 el 50 o el 175... A mí por lo menos me pasa. En esas carreras que por lo que sea me dejo ir en el último parcial, etc, al finalizar tengo la sensación de una pequeña insatisfacción, de no haber corrido más. En cambio en aquellas que corro al 100% de mis posibilidades sufro más pero acabo totalmente contento: He corrido como puedo correr (aunque haya quedado el 60).
Otro tema es la larga distancia. Que ahí no se sufre como un "perro", o se sufre de otra manera, calculando un sufrimiento de "baja intensidad" pero más tiempo... Y donde la satisfacción simplemente de acabar compensa con creces haber corrido "controlado" o no al 100%...
En cualquier caso cada uno seremos un mundo en esto de como disfrutamos del deporte, pero si que puede haber dos reglas básicas: Disfruta entrenando y compite como más te guste...
Y como leía recientemente en el blog del Chulo (citando a Rudyard Kipling)
"...Si puedes encontrarte con el triunfo y el fracaso (desastre) y tratar a estos dos impostores de la misma manera..."
En definitiva, que el triunfo o el fracaso no está en la línea de meta de un triatlón, se encuentra en el camino que has recorrido para llegar a él: Si has disfrutado en el camino has triunfado.
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