30 de marzo de 2011

Duatlón por equipos - Alcobendas


El triatlón es un deporte individual, eminintemente individual. Quizás por ello este tipo de pruebas, las pruebas en equipo, son especiales, y algunos las disfrutamos con intensidad.
Aunque ya hace años que se celebran pruebas en equipo contra el crono de triatlón, las de duatlón son relativamente nuevas. No sé si ha habido más de las 4 ediciones en las que he participado, creo que no: La 1ª de Medina del Campo, la 2ª también en Medina, ya en modalidad Campeonato de España, la 3ª en Segovia y la 4ª y última en Alcobendas (ambas también Campeonato de España de esta especialidad).
Decía que las disfruto especialmente, también quizás porque en ninguna de ellas me ha tocado sufrir en cola, y supongo que los toros se ven de diferente forma cuando estás con las fuerzas justas y  los cabestros te estiran el cuello, y hay que retorcerse para que los malditos animales no se te escapen… Pero bueno, también aguantar ahí sufriendo, y llegar tiene igual satisfacción.
En definitiva, encantado con correr estas pruebas cortitas, intensas, y en equipo.
Este año en el equipo “B”, disfrutando de la compañía de nuevos integrantes de Enphorma (ya somos más de 80!) y otros no tan nuevos: Gracias a Luis, Javier, Alberto, Dani y Juanjo. Aupa! El año que viene de nuevo dando guerra.
Triatlon Channel ha editado un vídeo con la prueba de Alcobendas de este fin de semana, donde se puede ver bastante bien la filosofía y espíritu de estas pruebas.
Ahora a ver donde nos toca correr esta prueba en el 2012 ;-)
 
 2008: Medina del Campo. Con Ecosport. Mejor puesto, 4ºs a unos segundillos del podium

2009: Medina del Campo. Nuestro 1ª año de Enphorma. Aquí es donde Nacho nos gritaba "Me estáis crispando, no vayáis tan rápido!!". Frase "estrella" que ya ha quedado como recurso cuando no se puede seguir el ritmo, y a gritar entre risas...

2010: Segovia. Día espectacular. Gran abrazo final (arriba)

2011: Alcobendas. Un lujo correr en "casa" gracias a la perfecta organización de nuestro antiguos compañeros de Ecosport Triatlón

21 de marzo de 2011

Material de Triatlón - Fondo de Armario

Casi todos los que estamos metidos en esto tenemos un armario lleno de achiperres y material de triatlón, eso sin contar el trastero, o la habitación de la cual nos hemos apoderado, donde acumulamos las bicis (la de montaña, la de carretera, la vieja de carretera, la de contrarreloj...) y las ruedas (las de entrenar, para competir...)
Y en ese armario siempre tenemos nuestros favoritos, esa chaqueta de la bici que buscamos en primer lugar cuando hace mucho frío, esos calcetines que rebuscamos al final del cajón porque son los más cómodos, esas gafas que son las mejores....
¿Qué llevamos? ¿Por qué lo llevamos? ¿Cuánto cuesta? Pero si somos populares, estamos locos...
Ésta es mi selección de aquello que he probado, desde el punto de vista totalmente subjetivo de un triatleta del montón, de los que rellenamos las pruebas y clasificaciones.
Empezaré por la cabeza, hasta llegar a los pies. Incluyendo los gadgets y complementos. De 6 a 6000 euros en 60 segundos....

Bisera. No solo para el verano, también la uso en invierno cuando llueve. Cualquiera, y si es de regalo de alguna prueba mejor ;-) De las primeras que llevé, y que aún dura: Una "Ironman". 15 euros.

Casco: Cualquiera "de marca". Los  mejores, y más bonitos, para mi gusto, los Specialized. Eso sí, si eliges el tope de gama prepara la cartera. Otra opción más económica, y normalmente también bonitos, son los Catlike o Spiuk. Yo me quedo con el Specialized Decibel (ya no está en catálogo), fue un regalo. 150 euros .
Casco Aero: También llamado de "Calimero". Me dije hace algún año que cuando acabase un IM me compraba uno para parecer bueno, y así fue. Todos los que he probado son incómodos (principalmente zona orejas, será que soy orejón). Bell Meteor II es el que llevo, y solo en competición, y algún día especial entrenando. 150 euros.

Gafas: Sin duda las mejores que he tenido, y con las cuales repito: Las M-Frame de Oaklay, que para mi gusto no han sido mejoradas, ni siquiera por modelos posteriores de la misma marca. Por calidad de visión de sus lentes, por visibilidad, por sujeción, por durabilidad, por peso, por estética... Un diez. 130 euros.

Gafas de natación: Para algunos de nosotros es muy complicado encontrar unas que te queden bien (que no entre el agua). Cuando las encuentro (y no vale con probárselas en la tienda, comprobando que hacen bien ventosa, hay que probarlas unos cuantos días seguidos en la piscina) compro 4 o 5 pares. Ahora tengo 4 pares iguales de unas Arena Vulcan Junior (sí, de niño, son las que me van bien). 15 euros.

Buff. Para el cuello, para la cabeza, para debajo del casco… Un clásico. 12 euros.

Tri Top: En la ropa de competir es cuestión de gustos, el TriTop no es demasiado importante, basta con que no te roce, estés comodo y te quede bien (que no es poco)… Me quedo con los modelos de Sugoi, en concreto el Tri Tank. 50 euros.

Camiseta térmica: Cualquiera de compresión, o que quede ajustada al cuerpo. Finas para entrenar a pie o un poco más gruesas para el invierno duro y la bici, de todas las que he tenido me quedo con la Under Armour Cold Gear Blitz Mock. 60 euros.


Polar invierno running: Para llevar encima de la camiseta térmica: Sin duda el mejor que tengo un Adidas Clima365 con Polartec. 60 euros.

Cortavientos: Para correr en invierno con aire. Encima del polar, o directamente de la camista térmica de invierno (según el grosor del cortavientos). Tengo de todos los tipos, de 15 a 100 euros, pero los del Decathlon hacen perfectamente su función (con ropa buena debajo). 15 euros.

Chaqueta térmica bici: De las que he tenido la mejor, también sin duda, una Gore Shoft Shell Windstopper. Esta prenda es crucial para la bici en invierno: Que transpire, que abrige y que pare el aire (windstopper). Merece la pena gastarse el dinero. 160 euros

Maillot verano: Cualquiera me vale, más o menos. 50 euros.
Bañador: Absolutamente los Speedo Endurance. Los que más aguantan el cloro de todos los que he probado, con diferencia. 28 euros.

Tri Short: No tengo un favorito claro. Aunque de los que hay en el armario me quedo con un Coocon, concretamente el de la foto. 70 euros.
Guantes: De seda para correr (en el Decathlon por pocos euros) y para le bici los mejores que puedas pagar. Por ejemplo unos Etxeondo (50 euros). Los Decathlon de seda para correr: 6 euros.

Culotte invierno: Sin duda alguna estos Assos Airprotec LL FI, una maravilla, a precio de oro, pero una maravilla. La badana es fantástica. 230 euros.
Culotte verano: Igualmente que en el caso anterior, estos Assos. 200 euros.
Mallas correr invierno. Las mejores para mí las Nike, pero cualquiera de las "buenas" vale, no hay tanta diferencia, y es cuestión de gustos. 50 euros.
Short correr verano. Lo mismo, aquí los que más me gustan son los cortos de pierna, tengo de todas las marcas, aunque más de Nike. 40 euros.
Calcetines. Los mejores sin duda, de todos los que he usado, los X-Socks. Muy buenos. Diferentes tipos según distancia, etc. 22 euros.

Medias de compresión: Si te gusta este artilugio (merece la pena al menos probarlo) yo me quedo con las Compressport. Su función es la de sujetar el gemelo, evitando en parte las vibraciones del golpeteo de la carrera, y principalmente la de favorecer el retorno venoso de esta zona. 35 euros.

Zapatillas correr: Aquí sí que después de tantos años corriendo tengo mis preferidas. Las Nike, cuando uno se ha acostumbrado a ese tacto blandito es dificil cambiar. Otra marca que también me ha ido bien son las Mizuno. Como modelo estrella para entrenar me quedo con las Nike Vomero. 140 euros.


Zapatillas ciclismo: Quizás éstas Specialized, aunque posiblemente me quedaría con unas viejas DMT que ya uso únicamente para el rodillo. 175 euros.

Cubre zapatillas: Prenda imprescindible para el invierno. Los que mejor me han ido son unos de neopreno de 1mm del Decathlon, ya que en mi caso los que son demasiado gordos me agobian, pero depende de tus pies. 30 euros.

Neopreno: He tenido pocos, unos 5, pero de ellos el Xterra Vengeance ha sido el mejor, o al menos el más cómodo. 450 euros.

Gadgets: El imprescindible: El pulsómetro-GPS, para saber el pulso, el ritmo real al que corres, la distancia, ver los recorridos en Google Maps, almacenar históricos, seguir circuitos, no perderte cuando corres por sitios desconocidos, etc, etc. He tenido de Polar, de otras marcas y Garmin. Me quedo sin duda con el Garmin 305 (eso sí, feo y grande), un todo en uno, mejorado por el 310XT que no tengo la suerte de tener. 275 euros
De otros gadgets he usado el PowerTap (medidor de potencia) pero no lo recomendaría a no ser que estés seguro que lo vas a utilizar para entrenar mejor (es decir lo vas a utilizar para "entrenar", no únicamente como "monitor" de potencia). Un inconveniente (además del precio) es el tema de la dichosa rueda. Estoy esperando a nuevos modelos en los que los sensores estén en los pedales y no en la rueda.

Bici: Soy de los que piensa que pagamos unos dinerales por algo que no lo vale. Con una bici de 1500-2000 euros, como mucho, tienes un bicicletón con todas las garantías. Aún así algunos nos seguimos gastando fortunas por capricho. Estoy contento con mi Specialized Tarmac S-Works, y también con la cabra Cervelo P3C, pero son eso, dos caprichos... Si que recomendaría, si haces larga, probar una cabra, la postura, la sensación, etc, es otro mundo, pero cierto es que hay que tener espacio y dinero para mantener tanta bici. 6000 euros.

Ruedas: No he probado demasiadas, de entreno, de aro de carbono (Cosmic y Zipp) y de palos. Para entrenar me quedaria con unas clásicas Mavic Open Pro con buje Ultegra, que siendo mucho más baratas que las Mavic Ksyrium SL (las que llevo ahora) eran igual de fiables y ligeras (más ligeras). Pero como rueda de competir en larga me quedo sin duda con las Hed3 de palos, que por desgracia vendí con una bici. 1500 euros.

Cubiertas entreno: Sin duda las Specialized Armadillo, en su versión ligera sin aro (35 euros x 2), o en su versión barata con aro rígido (24 euros x 2). Buen agarre lateral, rodadura suficiente para entrenar y casi te olvidas de los pinchazos. 70 euros.

Cubiertas competición: Hasta ahora Michelin ProRace, pero creo que voy a cambiar, demasiados pinchazos en Ironman. Acepto sugerencias de cubiertas "rápidas" y muy protegidas. Y si no al final creo que cuando vuelva a hacer una prueba larga monto las Armadillo, y punto. 76 euros.

Sillín: Esto si que es un mundo. Prueba y requeteprueba, y vas tirando el dinero… No sé por cuantos voy ya, ninguno me va 100% bien, soy de posaderas sensibles. De todos ellos me quedo, sin ser tampoco ideal, con los Fizik, en concreto con el Arione. 120 euros.

Achiperres piscina: Aquí es de lo más variado: Palas, antipalas, pullboy, bañadores lastre, aletas, tubos respiración, correctores de brazada…Para los que nos hundimos con cualquier cosa, nos da igual, lo único que te hacen más variada la sesión. Yo aletas y palas es lo que suelo usar últimamente: 40 euros.


Y ya hemos llegado a los pies, hemos pasado por alto algunas cosas secundarias. Y tampoco entramos en herramientas para la bici, etc. Lo único imprescindible es una bomba de pie con manometro, y aceite para la cadena, imprescindible, ya que como dice un ilustre: No te pierdas con el material, y sobre todo al final no te olvides de inflar bien las ruedas (mira en el lateral de la cubierta para la presión recomendada) y engrasa la cadena!!

9 de febrero de 2011

Charlatanes II


Escribía por aquí, hace ya más de dos años, de los charlatanes… Lo dejé pendiente, y hoy lo retomo, llamadme charlatán.

Los humanos somos una especie extraña, tremendamente extraña.
Una especie capaz de acelerar partículas subatómicas al 99,9999…% de la velocidad de la luz, de regenerar tejidos y órganos con células madre, de viajar por el espacio en maquinas imposibles, de escribir libros maravillosos que nos transportan más allá de donde nunca creímos poder llegar, incluso con las naves imposibles, de amar por encima de nuestra propia vida…
Seres increíbles, absolutamente fantásticos, capaces, maravillosos… Pero.

Pero a la vez somos un gran rebaño, en realidad un conjunto de grandes rebaños, irracionales en la mayoría de los casos, dirigidos por grandes charlatanes.
Es increíble la capacidad de sugestión que tiene la palabra cuando ésta viene “construida” y “elaborada” por estos charlatanes. Tan increíble que la realidad es que el mundo está dirigido y controlado por la palabra, casi siempre manipuladora. Algunos llaman líderes a los poseedores de este don. Y deben serlo, porque tras ellos algunos llegan a correr con cinturones de explosivos atados a la cintura, por poner un ejemplo extremo.

Y nos agrupamos en religiones que nos llevan donde nos llevan. Y en nombre de Dios (del que sea) se pueden hacer, y se han hecho, la mayores barbaridades de la humanidad.

Y nos encerramos en nacionalidades y banderas, nos parapetamos y nos armamos hasta los dientes, tras nuestros colores y fronteras, sin pensar que lo mismo que somos serbios pudiéramos haber sido andorranos, que esta cuestión es simplemente circunstancial.

Y nos agrupamos tras nuestro líder blanco, y odiamos a los negros. Tras nuestro líder cristiano y odiamos a los musulmanes. O…

Y rechazamos al inmigrante porque alguien, un líder, nos ha dicho que pone en riesgo nuestro bienestar.

Y nos escondemos tras una bufanda de un equipo de futbol, con otros tantos fanáticos, liderados por el más fanático del grupo, y nos vamos a patear a aquel que encontremos por la calle con los colores contrarios,

Y apoyamos y aupamos a nuestro dictador particular, esté éste donde esté. Y se llame como se llame, mientras alguien, los amigos del líder, nos diga que esa es la mejor opción de vida que tenemos…

Y las televisiones se llenan de esperpénticos personajes charlatanes, que con unas cartas del Tarot, o unos garbanzos de colores, te aseguran que vas a encontrar trabajo el mes que viene, o que se te va a curar ese riñón que tienes con cáncer. Y el problema no es el de los garbanzos de colores, el problema es que el teléfono suena y alguien lo marca.

Y adinerados y acomodados personajes de dudosa reputación nos indican que el camino a seguir es el del trabajo, sacrificio y esfuerzo. Y ahí que nos ponemos todos a sacrificarnos y esforzarnos, para mantener calentito a nuestro acomodado charlatán, no vaya a ser que se le enfríe la garganta y se le dañen las cuerdas vocales, y entonces no pueda seguir ejerciendo de charlatán. Un drama.

Y personajes de corbata, pulcras maneras y pletórica labia, se pasean por los MBAs y cursos de empresa dando seminarios de cómo gestionar el capital humano (que eufemismo esto del “capital humano”, no sé a quién se le ocurrió poner estas dos palabras juntas), de cómo ser un líder, o de cómo organizar mejor tu vida y tu tiempo…. Y muchos de ellos jamás han trabajado en una obra a pie de zanja, a duras penas son líderes (intentan serlo) durante los 45 minutos que dura la clase, y además su vida es un desastre…

Y charlatanes de las medicinas alternativas nos prometen curarnos, por ejemplo, con un supuesto principio activo que está tan diluido que aproximadamente hay una única molécula en una hipotética esfera de agua del tamaño de la distancia de aquí al Sol (eso es la Homeopatía). Y este negocio mueve cientos de miles de millones al año. Pero alguien nos dice que nos cura… Y nos cura.

Y pudiéramos seguir con los “Ys” indefinidamente.

Charlatanes. Siempre me dieron miedo los líderes, esos que quieren serlo, que incluso hacen cursos para serlo, siempre desconfié de ellos, incluso de aquellos que aparentemente tienen una inmaculada reputación.
Y miedo me dan también esos rebaños que conformamos alrededor de un líder, sea éste social, religioso, político…
Como cantan Marea en su “Como el viento de Poniente”, y que ya he puesto antes por aquí (varias veces): “Nunca seguí al rebaño porque ni el pastor ni el amo eran gente de fiar.”
Evidentemente esto no es totalmente cierto, porque de una u otra manera todos estamos en algún tipo de rebaño, pero digamos que hay rebaños más peligrosos que otros.
En cualquier caso en mi opinión, y así lo intento, si cada día reflexionamos y nos preguntamos si el que nos pastorea, o intenta pastorear, es gente de fiar, ya habremos avanzado mucho.

Y por compensar un poco este balance tan aparentemente negativo… Afortunadamente buenos ejemplos en la vida los vemos a diario. Y es que hace tiempo que de las personas por mi parte valoro los hechos y no las palabras. Son éstos “lideres” que no quieren serlo en los que me fijo, los que no se preocupan de serlo, y que ningún beneficio personal tienen por serlo. Son éstos los ejemplos que algunos intentamos tomar de referencia, o al menos de punto de comparación para constatar cuanto de lejos estamos del camino correcto.

Y el problema no es el de los garbanzos de colores, el problema es que el teléfono suena y alguien lo marca.